La Fisioterapia Estética planta cara a la precariedad laboral del sector
El auge de la fisioterapia estética o fisioestética no es casual, sino que puede leerse como una respuesta a la necesidad actual de los fisioterapeutas por destacar dentro de un mercado privado muy saturado. La figura del fisioterapeuta en España no está en su mejor momento. Así lo señalan en El País, que apunta que, en la actualidad, terminan la carrera 1.000 profesionales más que hace cinco años, pero solamente el 20% trabaja en ambulatorios y hospitales.
Cuando hablamos de fisioterapia nuestro imaginario nos lleva a pensar en un profesional de la salud, que se ocupa de trabajar un tratamiento terapéutico ante diversas dolencias del cuerpo humano sin utilizar fármacos ni quirúrgicos. Pero, la realidad es que un fisioterapeuta puede especializarse en ramas específicas, sin necesidad de desarrollar su actividad en centros de fisioterapia, centros sanitarios, residencias de ancianos o personas con discapacidad, gimnasios o entidades deportivas.
Cada vez más, estos profesionales deciden especializarse en diferentes áreas para poder desbancar la precariedad laboral existente del sector. Una de estas especialidades es la fisioterapia estética.
¿Qué es la fisioterapia estética?
Aplicar movimientos manuales y técnicas de estimulación con el fin de tratar una dolencia es la base de todo fisioterapeuta. Sin embargo, cuando hablamos de la especialidad en fisioterapia estética nos situamos en un espacio que aún resulta algo difuso. A través de la fisioestética aunamos técnicas de diferentes disciplinas como la medicina estética, la fisioterapia y las terapias manuales, para poder ayudar a recuperar estéticamente una zona concreta del cuerpo. Así pues, a través de técnicas como los masajes o la electroestimulación, por ejemplo, un fisioterapeuta estético puede dedicarse a la eliminación de celulitis o a la mejora de la elasticidad en la piel.
Fisioterapia dermatofuncional
Dicho de otro modo, los profesionales especializados en fisioterapia estética trabajan de manera externa para la recuperación física en los procesos de deterioro del cuerpo que implican un daño estético. A través de estos conocimientos y de una manera no invasiva, un fisioterapeuta estético se ocupa de ir a la causa del problema para agilizar los procesos de recuperación o embellecimiento; pero también para prevenir y eliminar patologías que influyen puntualmente sobre el autoconcepto del paciente.
La disciplina de la fisioterapia estética, en sus múltiples aplicaciones, también consiste en la aplicación de ejercicios que inciden en la corrección de la postura corporal, la realización de diferentes tratamientos faciales o la eliminación de moléculas de grasa en diferentes zonas del cuerpo, entre otros.
Beneficios de la fisioestética
Los beneficios de esta nueva especialización de la fisioterapia son múltiples, pero podríamos resumirlos en:
- Son tratamientos totalmente personalizados. El profesional tendrá siempre presente las peculiaridades del paciente y aplicará el tratamiento correspondiente a ello.
- No solamente se trata de estética, sino de bienestar. Por ejemplo, el drenaje linfático también consigue eliminar la famosa sensación de “piernas cansadas” e incluso tonificar grupos musculares.
- La salud en general se ve beneficiada. La eliminación de líquidos, el efecto antiinflamatorio o la revitalización de la piel son algunos de los beneficios que aporta la fisioterapia estética.
- Los tratamientos estéticos tienen mayor efecto. Por ejemplo, a la hora de aplicar un tratamiento con ácido hialurónico, el efecto será mayor si previamente se realizan masajes de fisioestética en la zona a tratar.
¿Qué tipo de tratamientos realiza un profesional de la fisioterapia estética?
Veamos algunos de los tratamientos faciales y corporales de fisiostética que tienen como objetivo mejorar o reparar las imperfecciones estéticas mediante un sistema no invasivo:
- Depresoterapia. Nos referimos a masajes técnicos que actúan directamente en áreas con celulitis o adiposis. Es el tratamiento de fisioterapia estética que permite desprender los adipocitos del tejido de la piel y ayudar a la eliminación de la celulitis.
- Electroestimulación. Existen una serie de músculos que tienen tendencia a la flacidez por falta de ejercicio o edad, como los tríceps. Con esta técnica fisioestética se consigue la estimulación de los músculos, para recuperar la elasticidad y tersura que se han perdido.
- Drenaje linfático. Es un masaje suave y repetitivo y con un ritmo más lento que el masaje tradicional, que incide directamente sobre los vasos linfáticos de la zona a tratar. Tiene el objetivo de estimular el sistema linfático, eliminar líquidos estancados -como el intersticial y el linfático-, y ayuda a que el cuerpo realice una función natural para fortalecer la zona.
- Corrección de cicatrices. Es posible oxigenar la piel de forma manual para ayudar a la correcta cicatrización. También, con el uso de productos específicos se consigue mejorar la piel y disimular las cicatrices que se quiera tratar el paciente.
- Reflexoterapia y aromaterapia. Combinando productos aromáticos, como los aceites esenciales, con la reflexoterapia, se puede aliviar estrés o eliminar toxinas.
- Tratamiento post terapia estética. Cuando un paciente se trata la piel, por ejemplo con un peeling, se elimina la capa superficial de la piel; y el fisioterapeuta puede realizar un masaje en la zona, para que aumente el efecto del producto aplicado.
Fisioterapia estética: una especialización muy demandada
A día de hoy la estética y sus tratamientos de imagen corporal se han convertido en un servicio muy demandado. Los datos hablan por sí solos:
- En 2022, el 40% de la población general española ha utilizado servicios de enfermería estética en alguna ocasión.
- El precio medio que se gasta un paciente en tratamientos de estética es de 1027€.
- Los tratamientos faciales representan un 72% de la facturación total.
Echando un ojo a la creciente demanda de los tratamientos de Imagen Corporal de los últimos años, y situando la figura del fisioterapeuta como un profesional más del sector estético, especializarse en fisioestética puede suponer una gran oportunidad para emprender o para conseguir mucha más autonomía profesional. Además de adquirir los conocimientos suficientes para poder trabajar en el ámbito estético y de la imagen corporal, se adquieren las herramientas para que permitan a los profesionales identificar y prevenir patologías asociadas a la alteración de la imagen corporal que, cada vez más, son visibles en nuestra sociedad.
