Llega el ‘wellaging’, la nueva tendencia para envejecer mejor
En el contexto de la piel, el envejecimiento natural se manifiesta en la pérdida de elasticidad, la formación de arrugas, la disminución de la producción de colágeno y elastina, además de cambios en la textura y tono de la piel. Factores genéticos, ambientales y de estilo de vida influyen en la velocidad y la forma en que se manifiesta el envejecimiento en cada individuo.
¿Qué es el 'wellaging'?
Disimular los signos de envejecimiento es la obsesión de millones de personas que invierten en tratamientos y cirugías para intentar ralentizar el paso del tiempo. Uno de los recursos más populares para combatir los efectos de la pérdida de firmeza y elasticidad y la aparición de arrugas ha sido la cirugía. Pero se está imponiendo una nueva tendencia menos invasiva que ha sido bautizada como “wellaging”, o lo que es lo mismo, envejecimiento natural.
Lo más importante para conseguir ese envejecimiento armónico y bello es mantener una buena hidratación y nutrición de la piel, unido a un estilo de vida saludable. También mantener hábitos de limpieza diaria y usar protectores solares, además de introducir antioxidantes y vitaminas a nuestra dieta.
Verse bien a partir de los 50 años respetando la naturalidad de nuestro cuerpo y rostro con tratamientos sutiles es la demanda popular que están recogiendo en la actualidad los centros de dermoestética.
Bakuchiol, la alternativa vegetal y similar al retinol
Dermoestética al servicio de la naturalidad
La medicina estética ofrece diversos tratamientos de belleza no invasivos y más saludables, indicados para mantener la naturalidad y frescura sin modificar nuestro aspecto, consiguiendo beneficios como los siguientes:
Estimulación del colágeno: Tratamientos como la terapia con láser, la radiofrecuencia y el microneedling ayudan a estimular la producción de colágeno, una proteína esencial para mantener la firmeza y elasticidad de la piel.
Renovación celular: Los peelings químicos y la microdermoabrasión son técnicas que exfolian la capa superficial de la piel, eliminando células muertas y estimulando la regeneración celular.
Hidratación y nutrición: Algunos tratamientos de dermoestética, como los rellenos de ácido hialurónico, pueden proporcionar hidratación profunda a la piel y restaurar su volumen, lo que mejora la apariencia de líneas y pliegues.
Mejora de la circulación: Algunos tratamientos, como la terapia de masaje y la mesoterapia, pueden mejorar la circulación sanguínea y linfática, lo que contribuye a una piel más saludable y radiante.
La prevención, nuestra mejor aliada
Se considera que entre los 25 y los 30 años se pueden comenzar a notar los primeros signos de envejecimiento. Ser conscientes de ello y adoptar unos hábitos de cuidado diario puede repercutir positivamente en nuestro aspecto a partir de los 40. Estas son algunas medidas que se pueden adoptar:
✔️ Uso diario de protección solar.
✔️ Mantener una piel hidratada usando cremas hidratantes y bebiendo suficiente agua.
✔️ Adoptar una dieta saludable rica en antioxidantes, vitaminas y ácidos grasos esenciales.
✔️ Evitar tabaco y alcohol.
✔️ Dormir entre 7 y 9 horas todas las noches.
✔️ Reducir el estrés.
Aunque envejecer es un proceso natural e inevitable, pueden aliviarse sus efectos en la piel prematuramente con un estilo de vida saludable y el uso de los productos cosméticos adecuados.