La música en el cine
Ayer, viendo un reportaje de Ennio Morricone, gran compositor italiano de bandas sonoras, pude darme cuenta de la importancia real de la música en el cine y en los formatos audiovisuales. Pensándolo, pude discernir en que lo cierto es que la experiencia cambia si vemos una imagen o una película con música o sin ella, es más: no lo vivimos de igual manera.
La experiencia auditiva llena la escena de una película, eso es cierto: incluso en el cine mudo se incluía la música, a través de una orquesta estratégicamente situada en la sala. La música en el cine refuerza y enfatiza diferentes situaciones de la escena, refuerza emociones y activa todos los sentidos, seguramente porque el oído produce una experiencia diferente, introduciendo el sonido en nuestro interior, complementando así el campo visual, interiorizando así la imagen.
Si hacemos la prueba lo podemos experimentar: si reproducimos una escena de una película que nos guste pero sin audio, podemos darnos cuenta que no le damos tanto sentido a la escena, en cambio al revés solo con el audio, nos hacemos una idea de la historia imaginando la escena visual, incluso es más intensa, ¿verdad?, y, si tiene música, es casi completa: vuelves a imaginar la parte visual y sigues sintiendo casi la misma experiencia que si la reproducción fuera audiovisual.
La música en el cine engancha con la imagen, sirve de hilo temporal y da más significado a nivel emocional
Pero, ¿somos conscientes de la importancia de la música en el cine cuando vemos una película?
Seguramente no del todo. Ejemplos de ello ocurren, por ejemplo, cuando hay suspense o se va a cometer el crimen y la música nos alerta o nos pone en tensión, reforzando a la imagen haciendo más intensa la escena. También cuando vemos una escena de amor o tristeza y, sin quererlo, soltamos la “lagrimita” con las primeras notas… dándole un poder dramático y evocador. En definitiva, la música proporciona ilimitadas percepciones al espectador.
Ennio Morricone: "La música de una película tiene que ser aquello que no se dice, ni tampoco se ve"
¿Cómo se dispone la música en una película?
Lo que sucede con la música en el cine es lo siguiente: siempre encontramos un tema, que sería el principal, y que se va repitiendo a lo largo de toda la película, pudiendo cambiar de timbre o de instrumento. También está el llamado contratema, que sería el tema que puede estar identificando a ciertos personajes, o cuando aparecen situaciones contrarias presentes en una escena como por ejemplo el bien y el mal, amor u odio, entre otros. Y, por último está el «Leitmotiv», es decir, fragmentos con los que se busca puntualizar diferentes caracteres de un personaje o bien situaciones de la escena.
