
Microneedling, la técnica que está revolucionando los tratamientos antiaging

El microneedling, también llamado dermapen o terapia de inducción de colágeno, es una técnica mínimamente invasiva cuya finalidad es penetrar en la piel estimulando su regeneración con producción de colágeno y elastina. Para ello se utilizan pequeñas agujas con las cuales se realizan micropunciones que permiten la absorción de principios activos mediante bioestimulación. Así se ayuda a mejorar la textura y tono de la piel.
Como ya sabemos, los niveles de colágeno comienzan a descender a partir de los 25 años. Con los años, nuestro cuerpo disminuye progresivamente la producción de esta proteína y debemos aportarla con técnicas de dermoestética.
Qué zonas se pueden tratar con microneedling o dermapen
Las principales zonas que se pueden tratar con un microneedling profesional incluyen:
Rostro
– Frente: Para mejorar arrugas finas y líneas de expresión.
– Mejillas: Para tratar cicatrices de acné, poros dilatados y mejorar la textura de la piel.
– Contorno de ojos: Ayuda a reducir la apariencia de líneas finas y arrugas.
– Labios y zona peribucal: Puede mejorar las arrugas alrededor de la boca.
– Mandíbula y mentón: Para tratar la flacidez y mejorar el contorno.
Cuello
– Ideal para mejorar la textura de la piel, arrugas y flacidez.
Escote
– Se utiliza para reducir arrugas finas y la textura rugosa de la piel en esta zona delicada.
Manos
– Ayuda a rejuvenecer la piel, mejorar manchas y arrugas en las manos.
Cicatrices en cualquier parte del cuerpo
– Cicatrices de acné, quirúrgicas, o por quemaduras pueden tratarse con microneedling para suavizarlas y mejorar su apariencia.
Estrías
– Se puede usar en áreas con estrías (abdomen, muslos, glúteos, caderas) para mejorar su apariencia y reducir su visibilidad.
Cuero cabelludo
– Se utiliza para tratar la caída del cabello y estimular el crecimiento capilar, especialmente en casos de alopecia.
El microneedling es versátil y puede aplicarse en casi cualquier parte del cuerpo donde se desee mejorar la calidad de la piel. La intensidad y profundidad del tratamiento varían según la zona y la condición de la piel. Además, es importante evaluar cada caso individualmente para asegurar que el tratamiento sea seguro y adecuado.
¿Cuáles son los cuidados necesarios tras un microneedling?
Después del procedimiento es normal un enrojecimiento de la zona, pequeña hinchazón y sensación de ardor. La piel necesitará algunos cuidados especiales para asegurar una correcta recuperación y maximizar los beneficios del procedimiento. Estos son los cuidados más importantes tras un microneedling o dermapen:
- Protección solar: evitar la exposición directa al sol durante al menos 48-72 horas después del tratamiento, ya que la piel estará más sensible y propensa a sufrir daños.
- Hidratación: es conveniente hidratar la piel con frecuencia para mantenerla suave y ayudar a la reparación de la barrera cutánea. Es preferible usar cremas hidratantes suaves, libres de fragancias y con ingredientes calmantes como el ácido hialurónico. Hay que evitar productos que contengan ingredientes irritantes, como retinoides, ácidos exfoliantes o vitamina C hasta que la piel haya sanado completamente.
- Evitar el maquillaje: no hay que usar maquillaje durante al menos 24-48 horas tras el microneedling. La piel tiene microcanales abiertos y el maquillaje puede causar irritación o infecciones.
- No tocar ni frotar la piel: así se protegerá de infecciones y se minimizará la irritación.
- Evitar sudoración intensa: evitar el ejercicio intenso, saunas, baños calientes o piscinas durante al menos 48 horas, ayudará a prevenir posibles irritaciones o infecciones.

¿Qué duración tiene el efecto del microneedling?
El efecto del microneedling puede variar dependiendo de factores como el tipo de piel, la condición tratada, la frecuencia de las sesiones y la profundidad del tratamiento. Los efectos más significativos del microneedling, como la reducción de arrugas finas, las cicatrices de acné y la mejoría en la firmeza de la piel, comienzan a ser visibles después de 4 a 6 semanas de la sesión. Esto se debe a que el colágeno producido por el proceso de reparación de la piel necesita tiempo para desarrollarse y estabilizarse. Dependiendo de la gravedad de la condición tratada y del objetivo del tratamiento, pueden ser necesarias varias sesiones (entre 3 a 6 sesiones) para obtener resultados óptimos.
El aumento en la producción de colágeno y la mejora en la calidad de la piel pueden durar de 3 a 6 meses después de una serie de tratamientos. Sin embargo, para mantener los resultados a largo plazo, se suelen recomendar sesiones de mantenimiento cada 6-12 meses. La duración de los efectos varía, ya que el envejecimiento y la exposición a factores ambientales como el sol también afectan la piel con el tiempo.