
6 mitos y realidades sobre el ácido hialurónico: lo que toda enfermera debería saber

El ácido hialurónico es uno de los tratamientos estrella en la enfermería estética. Sin embargo, a pesar de su popularidad, existen numerosos mitos que pueden generar confusión tanto en pacientes como en profesionales del sector. Es hora de aclarar las principales creencias erróneas y explicar las realidades basadas en la evidencia científica.
MITO 1: El ácido hialurónico es un relleno permanente
A diferencia de otros materiales de relleno, el ácido hialurónico es una sustancia biocompatible y reabsorbible. Dependiendo del tipo de ácido hialurónico y de la zona tratada, su duración varía entre 6 y 18 meses antes de ser metabolizado por el organismo.
MITO 2: Los tratamientos con ácido hialurónico son dolorosos
La verdad es que no es un tratamiento doloroso. Aunque las inyecciones pueden generar una leve molestia, la mayoría de los productos contienen lidocaína, un anestésico local que minimiza el dolor. Además, en la enfermería estética se emplean cremas anestésicas para mayor confort del paciente.
MITO 3: Todos los ácidos hialurónicos son iguales
Existen diferentes tipos de ácido hialurónico en función de su grado de reticulación. Los productos altamente reticulados se utilizan para voluminizar y estructurar, mientras que los menos reticulados son ideales para hidratación y rejuvenecimiento superficial.
MITO 4: El ácido hialurónico no migra tras su aplicación
Sí, puede migrar. Aunque en condiciones normales el producto se mantiene en la zona infiltrada, ciertos factores como la técnica de aplicación, la zona tratada y la expresión facial pueden favorecer la migración del material, especialmente si no se ha inyectado correctamente o se ha utilizado un producto inadecuado.
MITO 5: La hialuronidasa elimina el ácido hialurónico de inmediato y sin efectos secundarios
La hialuronidasa degrada el ácido hialurónico, pero su acción depende de la concentración utilizada y la reticulación del producto. Además, su aplicación puede causar inflamación y reacciones adversas, por lo que debe emplearse con precaución y bajo criterio profesional.
MITO 6: Se puede combinar cualquier ácido hialurónico con otros productos de relleno
No todos los materiales de relleno son compatibles entre sí. Mezclar diferentes tipos de productos en una misma zona sin una evaluación previa puede generar reacciones inflamatorias, encapsulaciones o asimetrías en el resultado final.
Sin duda, este tipo de relleno es uno de los tratamientos más utilizados en la enfermería dermoestética. Se utilizan en numerosos casos, como, por ejemplo, relleno de labios, la corrección de arrugas y surcos profundos, la armonización facial, la hidratación cutánea profunda y la rinomodelación no quirúrgica. También se utiliza en técnicas avanzadas de rejuvenecimiento como los skinboosters y el perfilado mandibular.
Antes y después de tratamientos de rejuvenecimiento facial realizados por enfermeras dermoestéticas
Es importante tener presente estos mitos para ofrecer tratamientos seguros y efectivos. La formación continua en este campo permite a las enfermeras especializadas aplicar técnicas avanzadas y mejorar la experiencia del paciente con resultados naturales.
En definitiva, la información y la educación en el uso del ácido hialurónico son fundamentales para desmitificar creencias erróneas y seguir elevando los estándares de la enfermería estética.